La policía marítima en Strömstad recibió una misión diferente esta semana.
La langosta azul Helga necesitaba ser transportada a la Havets Hus -Casa del Mar) en Lysekil.
– Con eso pudimos ayudarla, dice el policía Ove Magnusson al periódico Bohuslänningen.
La langosta azul fue encontrada por un pescador, que la bautizó con el nombre de Helga.
Después donó el pescador la langosta a la Casa del Mar en Lysekil. Allí iría el policía Ove Magnusson, que escoltó a la langosta de 30 centímetros de largo en su coche policía.
Langostas azules son raras. Según algunos informes hay una en 3000, pero otras fuentes mantienen que una en un millón. [aftonbladet.se]