Psiquiatras dan su versión del porqué de dichos ataques en la ciudad.
Han transcurrido 13 días desde que la tragedia se asomó a la vida de la universitaria Deisy Natalia Valencia, de 21 años.
Un hombre, al que la justicia aún no le ha dictado orden de captura, se le acercó y le roció ácido sulfúrico en el rostro, el cuello y los brazos, cuando la joven caminaba por una calle del barrio Paraíso de Kennedy.
Así como ella, 11 mujeres, entre los 13 y los 40 años, han sido atendidas en Bogotá desde el 2009 por casos idénticos (Lea más noticias sobre violencia contra las mujeres).
EL TIEMPO consultó a varios psiquiatras para saber qué factores causan estas atroces agresiones, todas ellas asociadas -al menos en los casos de Bogotá- a líos pasionales.
«El agresor no solo busca generar un daño físico, sino fundamentalmente, arrebatarle a la mujer su belleza y capacidad de atracción. Por eso, generalmente tienden a buscar el rostro», dice la reconocida psiquiatra Olga Albornoz.
En países como Afganistán o Pakistán es recurrente este tipo de acciones violentas contra la mujer, pero por un carácter más cultural que enfermizo, según Albornoz, quien subraya que eso hace que «en Colombia sea más grave la situación, porque estamos frente a casos claramente patológicos».
Enrique Pájaro Silva, psiquiatra de la Secretaría Distrital de Salud, otro experto en el tema, explica que una celotipia, que es un trastorno psicótico o delirante, no basta por sí sola para generar un ataque de este tipo. «Generalmente, hay marcadores genéticos o antecedentes de enfermedades mentales en las familias de los agresores. También se han dado casos en personas que consumen sustancias, como el bazuco, la cocaína o anfetaminas, y que se convierten en protagonistas de estas agresiones», afirma.
Ahora, las autoridades han conocido de al menos dos casos en los que los agresores no actúan directamente, sino que ofrecen dinero a otra persona para que alguien ejecute la acción. Aunque cada uno de los 12 casos de mujeres afectadas han sido investigados por cuenta de las autoridades, desde el jueves se conformó un equipo especial integrado por Medicina Legal, las secretarías de Salud y Gobierno, la Fiscalía y la Policía para analizar uno a uno y tratar de establecer si existe alguna relación entre ellos. […] [eltiempo.com]