El propio «Alí el Cómico» (Bagdad-Bob) de la industria del automóvil, Victor Muller, ha llamado a las paradas de producción regular en la fábrica de Saab en Trollhättan de un «resfriado mañanero».
Esta pequeña tapada de nariz, consiste sin embargo en escasez de capital aguda. Los subcontratistas han dejado sus suministros y surge la pregunta: ¿Cuánto tiempo tiene Saab medios de darse el lujo de pagar los salarios y los impuestos? ¿Es una cuestión de días o semanas?
El resfriado mañanero ha vaciado la fábrica de personal mientras que la empresa en su desesperación quiere vender terrenos y bienes y arrendarlos de nuevo del comprador. Sólo hay una pega: los contribuyentes, entre otros, han tomado la propiedad como garantes por los préstamos que han sido concedidos a Saab por el Banco Europeo de Inversiones. Y vender con los avales que hay en poder de la Oficina de la Deuda no se puede, de cualquier manera.
Pero la Oficina de la Deuda afirma haber tomado en forma considerable en términos de garantías, que exceden con mucho los 3,6 millardos de coronas que cubren estas. Se ha planteado la idea de que la Oficina de la Deuda podría ser tan amable como para curar «el resfriado mañanero» soltando algunas de las garantías. Saab entonces tal vez podría pedir prestado dinero en el mercado, o del célebre Vladimir Antonov.
Puesto que los contribuyentes no han tenido la oportunidad de tomar posición sobre la valoración de las garantías de la Oficina de la Deuda, no hay razón para atenerse a un principio de precaución: se trata básicamente de la credibilidad de una de las autoridades más importantes de Suecia. Es la Oficina de la Deuda la que cuida de la deuda nacional de Suecia.
Si Saab va a la quiebra – lo que no se puede descartar – y resulta que la Oficina de la Deuda está ahí con insuficientes garantías, sería una explosión. De repente quizás está el pueblo sueco como dueño de una empresa de piezas de repuestos, Saab Automobile Parts, que de ninguna manera vale lo que la autoridad ha creído.
¿Cómo son las valoraciones de la Oficina de la Deuda realmente? Esto no podemos saberlo por razones de confidencialidad comercial.
Si financieros privados como Antonov realmente quieren entrar y curar el resfriado mañanero, es sólo estrangular el desembolso del préstamo del BEI por la misma cantidad. Cuanto menor sea el importe que los contribuyentes deban avalar, mejor. […] [expressen.se]