El gigante de los muebles Ikea va a empezar a aplicar «transparencia total» con el fin de evitar acusaciones de que ocultan dinero en paraísos fiscales.
El fundador Ingvar Kamprad asume la culpa por el pasado lleno de secretismos, informa Expressen.
– Fue la culpa del «Fiasco de Ingvar», dice él al periódico.
Los hijos de Ingvar Kamprad se decidieron por la transparencia total dentro del Grupo Ikea, que es controlado por fundaciones, en una reunión familiar en Copenhague el pasado lunes, escribe Expressen. [svd.se]
– No tenemos nada que ocultar. No hay pretensiones de ocultar algo. Vamos a pasar por todo y demostrar que seguimos las leyes de cada país y regulaciones, dice Ingvar Kamprad a Expressen. [gp.se]
Lo dice ahora, casi un año después de que los medios suecos revelaran ‘la verdad detrás de Ikea’.
Pues sin ser ningun experto ni psicólogo, fácilmente saco la conclusión de que después de todo lo que se ha escrito el último año sobre el dueño y fundador de Ikea (sus mentiras y secretos sobre los millardos escondidos, su ataque de ira contra un periodista sueco cuando le preguntó ‘estás loco o qué?’ -salió luego en vídeo- sobre que trabajar en Ikea como empleado es ‘má o meno’ como meterse en una secta -lo de los tres monos: que ni ven, ni hablan ni oyen-, sobre su doble vida, de millardario a escondidas y de pobretón agarrado en público -sobre todo en sus apariciones públicas en Suecia-, sobre sus declaraciones anteriores de ‘que él no sabía nada de los millardos de Ikea”, que él era casi casi como un empleado más…, que ‘Ikea lo llevaba una fundación’, etc. etc., pues seguro que las ventas han bajado de forma significante en alguno o algunos países, y claro, en una reunión familiar, van y deciden lo que han dicho. Me imagino las conversaciones entre ellos: “Hostias!, algo tendremos que hacer!!!” o algo por el estilo.
Es despotorrante ver como espectador lo que la gente hace por el dinero. Cómo mienten, cómo siguen mintiendo, cómo giran la vela según el viento.
Y todo porque el tío debe tener algún trauma de la infancia de que más o menos es pecado ‘mostrarse rico’. Que hay que mostrarse pobre y que la gente no debe saber que uno es rico, porque si lo saben, no te entran a la tienda a comprar, o algo así.
