La aerolínea holandesa KLM llena sus tanques de aviones con aceite de fritura de papas fritas para reducir las emisiones de carbono. Escribe la revista Vagabond.
En septiembre comenzará la KLM entre Ámsterdam y París con combustible bioqueroseno que respeta el medio ambiente y se extrae del aceite de fritura de comidas. El combustible ecológico se mezcla con el combustible de aviación normal y el objetivo es reducir las emisiones de carbono a la mitad. Un total de 200 vuelos serán realizados. La compañía ya ha volado con bioqueroseno en plan de prueba en el tanque pero el combustible no ha llegado a los requisitos técnicos, pero ahora la KLM ha obtenido aprobación para ‘conducir’ vuelos de pasajeros reales con el combustible. El aceite proviene entre otros de restaurantes, hoteles y fábricas de papas fritas. [dn.se]